Las víctimas de esta trama caen en la trampa de los pandilleros creyendo que obtendrán el pasaje para poder emigrar legalmente a EE.UU., pero su destino final será la muerte.
La pandilla salvadoreña Mara Salvatrucha (MS13) ha empezado a operar con un sofisticado método delictivo, en el que una de las víctimas es embaucada creyendo que podrá emigrar legalmente a EE.UU., informa Associated Press.
Esta nueva estructura criminal ha sido denominada por las autoridades de El Salvador como las viudas de negro, debido a que la trama consiste en llevar a cabo un matrimonio forzado entre un hombre y una mujer que nunca se han visto.
El modus operandi de este método fue descubierto gracias a las declaraciones de una de las víctimas que logró escapar de las manos de los pandilleros. Mónica (un nombre ficticio por motivos de seguridad), detalló a las autoridades salvadoreñas que fue contratada por una mujer para realizar servicios domésticos, pero al llegar a la casa donde trabajaría comprendió que se trataba de una propiedad de la Mara Salvatrucha, y a la joven no le quedó más opción que obedecer.
Mónica fue víctima de explotación sexual, violencia física y bajo amenaza de muerte fue obligada a casarse con un desconocido. El novio, por su parte, cayó en la trampa de los pandilleros creyendo que su esposa era una ciudadana estadounidense, lo que supuestamente le facilitaría emigrar de forma legal a EE.UU., aunque su destino final en esta trama era la muerte.
Un sangriento negocio
Por el momento los investigadores ignoran cuánto suele pagar una víctima por un enlace con una supuesta ciudadana estadounidense, pero descubrieron que los novios son engañados para que compren un seguro de vida, argumentando que es un requisito de las autoridades migratorias norteamericanas.
Los matrimonios de las viudas de negro finalizan al cabo de unas cinco semanas. A las mujeres se les informa que sus esposos fueron asesinados y se les exige reclamar el cuerpo en la morgue, encargarse de los trámites del sepulcro y pedir a la Fiscalía que investigue el crimen. Después, concluidos los trámites legales, las envían a cobrar el seguro del que son beneficiarias.
Al igual que Mónica, varias mujeres más han sido reclutadas en las mismas circunstancias por la MS13 para forzarlas a contraer matrimonio con hombres desconocidos. Sin embargo, las autoridades salvadoreñas no tienen cifras del número de víctimas afectadas por esta nueva estructura criminal, pero consideran que la estafa a las instituciones bancarias es de decenas de miles de dólares.